lunes, 3 de diciembre de 2007

DE GOBERNABILIDAD Y POLITICOS

Por Jorge Luís Falcón Arévalo*

"Juicio no es el conocimiento de las leyes fundamentales; es sabercómo aplicar a ellos un conocimiento." -Charles Gou-

La gobernabilidad democrática como condición para el desarrollo humano es un tema de debate. Buena parte de la discusión se ha centrado en el papel del crecimiento económico, la reforma de las instituciones y la profundización de libertades civiles en relación al desarrollo, pero poco se ha hablado de otros requisitos que favorecen la construcción de esta gobernabilidad, como el fomento de los cambios políticos y sociales necesarios, y la participación activa de los actores sociales en estas tareas.

¿De qué actores hablamos? Si los que han incursionado en la gobernabilidad democrática, son aprendices de todo y oficiales de nada. Es decir, gente no instruida, no culta tanto en el quehacer político, como en las labores administrativas. Mucho menos –algunos-en su propia profesión académica. Hay muchos participantes; pero,escasa gente que tenga una amplia visión de la cultura en general.

Para una corriente de pensamiento mayoritaria, el remedio a la crisis de la democracia requiere, entonces, poner en práctica lo que se ha dado en llamar el principio de buena gobernanza ,buen gobierno o buena gobernabilidad. Lo que llamamos eficiencia y eficacia en la dotes de una buena administración. Hasta este momento a dos años del gobierno estatal y año y medio de la comuna acapulqueña, no se ha visto eficiencia administrativa; menos eficacia en las políticas públicas.Es más, no se ha visto, el sólo trabajo cotidiano que por norma laboral deben ejecutar. Hay inercia administrativa.

La aparición del concepto de buena gobernabilidad implica no sólo una nueva percepción de la actividad pública, sino también de la interacción con los otros agentes sociales.Así pues, buena gobernabilidad, en su sentido más general, supone un cambio en la forma de gobernar, mejorando la gestión pública hacia unos servicios públicos transparentes, responsables y eficientes, y creando un marco legal y político que permita la participación plural;al tiempo, hace referencia a nuevos fenómenos, como la aparición de redes complejas de actores sociales que habrán de demostrar que en si se buscan nuevas realidades para las generaciones venideras. En fin,un mejor futuro no peyorativo, sino de franco desarrollo.

La debilidad de la sociedad civil, crucial para la defensa de las libertades, es un factor que juega en contra de la gobernabilidad.¿Por qué? Porque esta es y ha sido masa moldeable por esquemas anacrónicos de gobiernos que no se dejan morir. Existen "actores" tras bambalinas que hacen el juego sucio. De ellos, la propia sociedad debe desenmascararlos.La sociedad debe buscar la alternancia democrática participando activamente, no tras el ruedo, no como espectador, sino como un elemento de cambio. Es decir, ser un dígito democrático entre sus deberes y derechos.Los "actores" tras el telón, son los mismos que cambian de partido político y con ello demuestran su baja calidad no tan solo como seres humanos, sino como entes de confianza. Otros promueven corrientes partidistas; porque sus ambiciones, son voraces por alcanzar no tan solo el poder ominoso; sino el placer de sentirse un "super hombre",entre sus vasallos.

*Librepensador en la democracia de sus opiniones. sin.marca@gmail.com

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